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Antecedentes de la consagración de Rusia del 25 03 2022

El 2 de marzo, miércoles de ceniza de 2022, los obispos católicos de rito latino de Ucrania habían pedido al Papa Francisco que consagre públicamente a su país y a Rusia al Inmaculado Corazón de María, como lo pidió la Virgen en Fátima.

Carta de los obispos de Ucrania al Papa Francisco del 2 de marzo de 2022 en la que le piden que consagre Ucrania y Rusia al Corazón Inmaculado de María como lo pidió la Virgen en Fátima

Acto de Consagración de Ucrania por sus obispos al Inmaculado Corazón de María

En declaraciones a CNA, agencia en inglés del Grupo ACI, el Arzobispo de Leópolis (Ucrania), Mons. Mieczyslaw Mokrzycki, habló sobre la validez de la consagración de Rusia realizada por el Papa Juan Pablo II y aseguró que cree que se había hecho correctamente, pero que sería beneficioso repetirla “para asegurar la paz de nuevo, tras el último estallido de la guerra”.

El 15.03.2022, se anuncia que el papa Francisco consagrará Rusia y Ucrania al Inmaculado Corazón de María el 25.03.2022.
El 2.03.2022, miércoles de ceniza, los obispos de Ucrania le habían pedido al papa que lo hiciera, como pidió la Virgen en Fátima (13.07.1917).

El Papa Francisco anuncia el 15 03 2022 personalmente en Twiter que consagrará Rusia y Ucrania al Inmaculado Corazón de María el 25 03 2022, fiesta solemne de la Encarnación, en la Basílica de san Pedro

2022 03 17 se anuncia que el papa Francisco quiere invitar a todos los obispos a realizar con él la consagracion de Rusia al Inmaculado Corazón de María el 25.03.2022

2022 03 21 el papa Francisco invita a todos los obispos a realizar con él la consagracion de Rusia al Inmaculado Corazón de María el 25.03.2022, les envía la plegaria de consagración y se publica. Contiene una mención explícita de la consagración de Rusia (y de Ucrania).

Carta del papa Francisco a todos los obispos del mundo en la que les invita a unirse a la Consagración y les participa del texto de la oración de consagración

Plegaria de la Consagración al Inmaculado Corazón de María del 25 de marzo de 2022
Madre de Dios y nuestra, nosotros solemnemente encomendamos y consagramos a tu Corazón inmaculado nuestras personas, la Iglesia y la humanidad entera, de manera especial Rusia y Ucrania. Acoge este acto nuestro que realizamos con confianza y amor, haz que cese la guerra, provee al mundo de paz.

Fuentes: https://www.aciprensa.com/noticias/8-datos-sobre-la-consagracion-de-rusia-y-ucrania-a-la-virgen-que-hara-el-papa-francisco-10315

San Luis María Grignion de Montfort recomendó la fecha del 25 de marzo, fiesta solemne de la Encarnación, para realizar la consagración personal a María

Los obispos católicos de rito latino de Ucrania envian una carta al Papa Francisco el 2 de marzo pidiéndole que “realice públicamente el acto de consagración al Inmaculado Corazón de María de Ucrania y Rusia, como lo solicitó la Santísima Virgen en Fátima”.

En la aparición del 13 de julio de 1917 en Fátima, Nuestra Señora había pedido la consagración de Rusia a su Inmaculado Corazón, afirmando que si no se concedía esta petición, Rusia extendería «sus errores por todo el mundo, promoviendo guerras y persecuciones a la Iglesia». «Los buenos», añadió, «serán martirizados, el Santo Padre tendrá mucho que sufrir, varias naciones serán destruidas».

Durante la Primera Guerra Mundial, el 13 de julio de 1917, en la tercera aparición de la Virgen de Fátima, les dijo a los pastorcitos:

“Habéis visto el infierno a donde van las almas de los pobres pecadores. Para salvarlas, Dios quiere establecer en el mundo la devoción a mi Inmaculado Corazón. Si hicieran lo que os voy a decir, se salvarán muchas almas y tendrán paz. La guerra va a acabar. Pero si no dejan de ofender a Dios, en el reinado de Pío XI comenzará otra peor. Cuando vierais una noche alumbrada por una luz desconocida, sabed que es la gran señal que Dios os da de que va a castigar al mundo por sus crímenes por medio de la guerra, del hambre y de persecuciones contra la Iglesia y el Santo Padre».
«Para impedirla, vendré a pedir la consagración de Rusia a mi Inmaculado Corazón, y la comunión reparadora de los primeros sábados. Si atendieran mis peticiones, Rusia se convertirá y habrá paz. Si no, esparcirá sus errores por el mundo, promoviendo guerras y persecuciones contra la Iglesia. Los buenos serán martirizados, el Santo Padre tendrá que sufrir mucho, varias naciones serán aniquiladas. Por fin, mi Inmaculado Corazón triunfará. El Santo Padre me consagrará a Rusia, que se convertirá y será concedido al mundo algún tiempo de paz. En Portugal se conservará siempre la doctrina de la fe…"

En la carta que Sor Lucia escribió al Santo Padre el 12 de mayo de 1982: « la tercera parte del “secreto” se refiere a las palabras de Nuestra Señora: “Si no (Rusia) diseminará sus errores por el mundo, promoviendo guerras y persecuciones a la Iglesia. Los buenos serán martirizados, el Santo Padre tendrá que sufrir mucho, varias naciones serán destruidas” ». (Carta citada por Ratzinger en el Comentario del 26.06.2000 al texto del Tercer secreto de Fátima)

El 10 de octubre de 1925, la Virgen María se le aparece a Lucía en la Casa de las religiosas de Santa Dorotea en Pontevedra, donde era postulante a la vida religiosa. La Virgen le encomienda propagar la devoción reparadora de los cinco primeros sábados, que Jesús quiere establecer en desagravio del Inmaculado Corazón de María. El 15 de febrero de 1926, el propio Jesús se le aparece a Lucía también en Pontevedra y le concreta algunos puntos de la práctica de esa devoción, que no fue aprobada por el obispo de Fátima-Leiría hasta el 13 de septiembre de 1939.

El 13 de junio de 1929, La Virgen María se le aparece a Lucía en la Casa de las religiosas de Santa Dorotea en Tuy y le dice:

"Ha llegado la hora en que Dios pide que el Santo Padre haga, en unión con todos los obispos del mundo, la consagración de Rusia a mi Corazón Inmaculado; prometiendo salvarla por este medio".

Después de las apariciones de Fátima, Pontevedra y Tuy, hubo varios actos de consagración al Corazón Inmaculado de María:

Pío XI no realizó ninguna consagración, pero sí Pío XII:

Pío XII, el 31 de octubre de 1942 en un radiomensaje en portugués, consagró el mundo entero al Corazón Inmaculado de María con una alusión velada a Rusia, sin mencionarla explícitamente, y sin la participación de los obispos del mundo. La renueva en italiano el 8.12.1942.

"...A Ti, a tu Corazón Inmaculado, en esta hora trágica de la historia humana, te confiamos, te encomendamos, te consagramos no sólo la Santa Iglesia ... sino también el mundo entero ... víctima de sus propias iniquidades.

A los pueblos separados por el error o por la discordia, es decir, a los que te profesan singular devoción, donde no había casa que no exhibiera tu venerable icono (hoy quizás escondido y reservado para tiempos mejores), dales la paz y condúcelos de regreso al único redil de Cristo, bajo el único y verdadero Pastor.

Obtende paz e liberdade completa à Igreja santa de Deus; sustai o dilúvio inundante de neo-paganismo, todo matéria; e fomentai nos fiéis o amor da pureza, a prática da vida cristã e o zelo apostólico, para que o povo dos que servem a Deus, aumente em mérito e em número.

Obtén la paz y la libertad completa para la santa Iglesia de Dios; detén el diluvio inundante de neo-paganismo, toda materia; y fomenta en los fieles el amor a la pureza, la práctica de la vida cristiana y el celo apostólico, para que el pueblo de los que sirven a Dios crezca en mérito y en número.

Finalmente, así como la Iglesia y todo el género humano fueron consagrados al Corazón de vuestro Jesús, para que, poniendo en Él todas sus esperanzas, les fuese signo y prenda de victoria y de salvación (cf. Litt. Enc. Annum Sacrum: Acta Leonis XIII tomo 19, página 79), así desde hoy también sean perpetuamente consagrados a Ti y a tu Corazón Inmaculado, oh Madre nuestra y Reina del mundo: para que tu amor y tu patrocinio apresuren el triunfo del Reino de Dios, y todas las generaciones humanas, pacificadas entre sí y con Dios, Te proclamen bienaventurada; y contigo entonen, de un polo al otro de la tierra, el eterno Magníficat de gloria, amor, gratitud al Corazón de Jesús, el único en el que se puede encontrar la Verdad, la Vida y la Paz.

La beata Alejandrina María da Costa influyó para que en 1942 el Papa Pío XII consagrara el mundo al Inmaculado Corazón de María.

El papa Pío XII consagró Rusia al Inmaculado Corazón de María en 1952 en la Carta Apostólica Sacro vergente anno, igualmente sin la participación de los obispos del mundo:

«Así como hace unos años consagramos el mundo entero al Corazón Inmaculado de la Virgen Madre de Dios, ahora, de manera muy especial, consagramos todos los pueblos de Rusia al mismo Corazón Inmaculado» (Carta Apostólica Sacro vergente anno).

El 21 de noviembre de 1964, san Pablo VI renovó la consagración del mundo al Corazón Inmaculado en presencia de los Padres del Concilio Vaticano II:

"Encomendamos a Tu Corazón Inmaculado todo el género humano; condúcelo al conocimiento del único y verdadero Salvador, Cristo Jesús; aleja de él el flagelo del pecado, concede a todo el mundo la paz en la verdad, en la justicia, en la libertad y en el amor".

El papa san Juan Pablo II renovó esa consagración el 13 de mayo de 1982, y de nuevo el 25 de marzo de 1984 y el 8 de octubre de 2000.

San Juan Pablo II compuso una oración para lo que llamó un «Acto de Encomienda» que se celebraría en la Basílica de Santa María la Mayor el 7 de junio de 1981, solemnidad de Pentecostés. Este es el texto:

«Madre de los hombres y de los pueblos,Tú conoces todos sus sufrimientos y sus esperanzas, Tú sientes maternalmente todas las luchas entre el bien y el mal, entre la luz y las tinieblas que sacuden al mundo, acoge nuestro grito dirigido en el Espíritu Santo directamente a tu Corazón y abraza con el amor de la Madre y de la Esclava del Señor a los que más esperan este abrazo, y, al mismo tiempo, a aquellos cuya entrega Tú esperas de modo especial. Toma bajo tu protección materna a toda la familia humana a la que, con todo afecto a ti, Madre, confiamos. Que se acerque para todos el tiempo de la paz y de la libertad, el tiempo de la verdad, de la justicia y de la esperanza».

Este acto de consagración del 7 de junio de 1981, lo repitió en Fátima el 13 de mayo de 1982.

El 25 de marzo de 1984, en la plaza de San Pedro, en unión espiritual con todos los Obispos del mundo, precedentemente «convocados», el Papa consagra a todos los hombres y pueblos al Corazón Inmaculado de María, en un tono que evoca las angustiadas palabras pronunciadas en 1981

«He aquí que, encontrándonos hoy ante ti, Madre de Cristo, ante tu Corazón Inmaculado, deseamos, junto con toda la Iglesia, unirnos a la consagración que, por amor nuestro, tu Hijo hizo de sí mismo al Padre cuando dijo: “Yo por ellos me santifico, para que ellos sean santificados en la verdad” (Jn 17, 19). Queremos unirnos a nuestro Redentor en esta consagración por el mundo y por los hombres, la cual, en su Corazón divino tiene el poder de conseguir el perdón y de procurar la reparación.
El poder de esta consagración dura por siempre, abarca a todos los hombres, pueblos y naciones, y supera todo el mal que el espíritu de las tinieblas es capaz de sembrar en el corazón del hombre y en su historia; y que, de hecho, ha sembrado en nuestro tiempo.
...
Madre de la Iglesia: ilumina al Pueblo de Dios en los caminos de la fe, de la esperanza y de la caridad. Ilumina especialmente a los pueblos de los que tú esperas nuestra consagración y nuestro ofrecimiento. Ayúdanos a vivir en la verdad de la consagración de Cristo por toda la familia humana del mundo actual.
Al encomendarte, oh Madre, el mundo, todos los hombres y pueblos, te confiamos también la misma consagración del mundo, poniéndola en tu corazón maternal.

Se dice que en esa consagración san Juan Pablo II también mencionó a Rusia para sus adentros. Ni en el texto escrito, ni en el audio aparece la palabra Rusia.

En el décimo aniversario del atentado que sufrió el 13.03.1981, san Juan Pablo II peregrinó de nuevo al santuario de Fátima (12/13-V-1991).

En su tercera peregrinación a Fátima, san Juan Pablo II beatificó a Francisco y Jacinta, con asistencia de Sor Lucía y de inmensa multitud de peregrinos (13-V-2000).

El mismo 13 de mayo de 2000, la Santa Sede reveló la tercera parte del secreto de Fátima mediante la lectura pública del texto de sor Lucía realizada allí, en el Santuario de Fátima, por el Secretario de Estado, Cardenal Sodano, anteponiendo una introducción suya en la que afirmaba que el texto empleaba un lenguaje simbólico y que su contenido ya se había cumplido con el intento de asesinato sufrido por san Juan Pablo II el 13.05.1981.

El 26 de junio de 2000, la Santa Sede publicó la tercera parte del secreto de Fátima, y Tarcisio Bertone, entonces Arzobispo Secretario de la Congregación para la Doctrina de la Fe, señaló que Sor Lucía, en una carta de 1989, había asegurado que este acto solemne y universal de consagración correspondía a lo que Nuestra Señora quería: («Sim, està feita, tal como Nossa Senhora a pediu, desde o dia 25 de Março de 1984»: «Sí, desde el 25 de marzo de 1984, ha sido hecha tal como Nuestra Señora había pedido»: carta de sor Lucía de 8 de noviembre de 1989). Y Bertone lo dio como confirmado.

Textos de las tres partes del secreto de Fátima en facsímil,
con su transcripción, traducción y textos introductorios de la Santa Sede

La tercera parte del secreto de Fátima y la versión acomodaticia de su significado

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Benedicto XVI peregrinó a Fátima (2/13-V-2010), consagrando a la Virgen especialmente a todos los sacerdotes de la Iglesia.

El 13 de octubre de 2013 en la Plaza de San Pedro, el Papa Francisco realizó un acto de consagración a la Virgen de Fátima al final de la Misa en la jornada mariana del Año de la fe
"Acoge con benevolencia de Madre
el acto de consagración que hoy hacemos con confianza,
ante esta imagen tuya tan querida por nosotros".

El día anterior: "Esta tarde, Madre, te damos gracias por tu fe de mujer fuerte y humilde; y renovamos nuestra entrega a ti, Madre de nuestra fe. Amén".

Y por fin el 25 de marzo de 2022, el papa Francisco consagró al Inmaculado Corazón de María Rusia y Ucrania, y el mundo entero
"Madre de Dios y nuestra, nosotros solemnemente encomendamos y consagramos a tu Corazón inmaculado nuestras personas, la Iglesia y la humanidad entera, de manera especial Rusia y Ucrania. Acoge este acto nuestro que realizamos con confianza y amor, haz que cese la guerra, provee al mundo de paz".

.Fátima.